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Es preciso llevar algún caos dentro de sí para poder engendrar estrellas danzarinas. Nietzsche.

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No hay más realidad que la que tenemos dentro. Por eso la mayoría de los seres humanos viven tan irrealmente; porque cree que las imágenes exteriores son la realidad y no permiten a su propio mundo interior manifestarse. Se puede ser muy feliz así, desde luego. Pero cuando se conoce lo otro, ya no se puede elegir el camino de la mayoría. Hermann Hesse.

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¡¡Déjame con la boca abierta!!

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Si la personalidad humana no adquiere toda su fuerza, toda su potencia, entre las cuales lo lúdico y lo erótico son pulsiones fundamentales, ninguna revolución va a cumplir su camino. Julio Cortázar

miércoles, 27 de marzo de 2019

La niña de la muñeca


En el mundo de los escritores se cuenta una historia que nadie sabe si fue real o es leyenda. Tampoco se sabe a ciencia cierta quién es el primero que la promulgó. Es un relato muy bello que casi siempre es oral.

Dice la leyenda que un año antes de su muerte, Franz Kafka conoció en un parque a una niña que lloraba desconsoladamente porque había perdido su muñeca. Conmovido por el llanto de la niña, Kafka se presentó a ésta como un “cartero de muñecas”  y para consolarla se inventó la historia de que la muñeca se había ido de viaje y que él recibiría las cartas que tenía que entregar a la niña. La niña quedó fascinada con la historia y de las lágrimas pasó a un gran contento. Kafka ante la exagerada alegría de la niña, se comprometió a entregarle las cartas que la muñeca le enviaría. Y durante tres semanas, cada día, se dedicó el escritor a escribir las cartas de la muñeca.

Sea o no sea real la historia es preciosa. Y aunque dicen que nunca ha podido ser demostrada con documentos, es digna de Kafka (?)… un cuento con un fondo idealista… como un divertimento, tal vez para aligerar sus cuestiones existenciales internas; esos monstruos que siempre le acecharon… quizás una “metamorfosis” que al final lo redimiera, pues esta historia aseguran que la vivió poco antes de su muerte.


  Franz a los 5 años (1888)

20 comentarios:

  1. No conocía esa historia.
    Me ha emocionado... y me da igual que no sea cierta.
    La magia me ha besado.
    Gracias.

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    1. La historia es preciosa, nos presenta a un candoroso Kafka, muy tierno, y el hecho de que sea algo inventado por alguien...eso ya queda en segundo plano.

      Un beso.

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  2. Hay gran delicadeza en las palabras

    Cierto es que las muñecas al final son abandonadas por las niñas cuando se convierten en adolescentes

    ¿Quien escribe cartas a las muñecas olvidadas? ¿Hay un lugar donde descansan olvidadas?

    Besos

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    1. Pues yo te diré que aún tengo las muñecas que me regaló mi abuela. Cierto es que ahora ya las contemplo como reliquias pero quizás con el tiempo tengan más valor y alguien puede que las herede cuando yo ya no esté.

      ...y escribir cartas a muñecas olvidadas...quizás a algún escritor se le ocurra algo sobre el tema. Piénsalo tú, guapetón.

      Besos.

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  3. Mis nietos tienen todos un peluche KikoNico, suave y amoroso, tiene la cabeza desproporcionada, y varios remiendos. Y sobre todo una historia muy parecida, con carta incluida. Puede que su historia provenga de la de Kafka. Por si sientes curiosidad o tienes que hacer un regalo https://www.imaginarium.es/peluche-kiconico-kiconico-47472.htm. Abrazos

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    1. Ester, he estado mirando y el juguete es muy bonito, además ya he visto que se ha creado una historia para crear fondos...buena idea.
      Abracito.

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  4. Me gusta eso de cartero de muñecas, ¿donde se oposita para el puesto?

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    1. No estaría mal eso, hablar con niñas que pierden muñecas, jaja, hacer la vida divertida a los niños evitaría que luego de mayores algunos no tuvieran tan mala leche, jajaja.

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  5. Sea o no ver, es muy tierno. Kafka puede que fuera un tanto especial, pero con la nena de la leyenda tuvo mucho cuidado para impostar a una muñeca viajera que escribía cartas a "su" niña.

    Muy buena entrada. Un abrazo

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    1. La historia es muy tierna, y nos emociona más por venir de un escritor con fama de raro e incomprendido. Sea como sea, y quien la creó tuvo buenas intenciones.

      Abracito.

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  6. Hola Marián Que bonita historia, eso dice mucho de la grandeza de loas/as personas que son capaces de inventar o diría imaginar historias para hacer feliz a un niño..
    Un abrazo.

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    1. La historia es muy bella, y más por eso que dices tú, porque hace feliz a una niña.
      Hacer felices a los niños sería lo mejor para todos. Luego no pasarían las cosas que pasan por culpa de ese desamor hacia ellos.
      Un abrazo

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  7. Qué bonita historia, mi querida Marián. La desconocía. Gracias.

    Mil besitos y feliz finde ♥

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    1. La historia es muy bonita, Seguro que se la inventó alguien que le tenía afecto a Kafka.

      Besos. Auro.

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  8. Toda una historia, ya sea real. O que alguien haya tenido el mérito de imaginarla.

    Besos.

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    1. Pues es cierto que la historia si no la vivió Kafka, el que se la inventó no le faltó imaginación.

      Besos.

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  9. Bien kafkiano todo. ¿Cuándo recibirá la última carta la niña? ¿A la muerte de la muñeca, del cartero o de ella misma?

    Saludos,

    J.

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    1. ¡Madre mía! Pues a posteriori la muerte rondaba sobrevolando sobre la historia, qué cosas.

      Saludos.

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  10. Una historia preciosa.

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    1. Así tenían que ser todas las historias de niños...
      Un beso, Tracy.

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Ni aún el genio más grande iría muy allá si tuviera que sacarlo todo de su propio interior. Goethe.