Agosto nos enseña la patita por debajo de la puerta... ¡Ssssh!
Acabo de llegar... anoche estaba contemplando el Sena, miraba también, las obras de Notre Dame. Y pensé en aquel día en que los pirómanos salieron en estampida a contemplar las llamas desde las primeras filas... la primera estructura que ardió a vista de todos y que se derrumbó ante la estupefacción de quien seguía la evolución del incendio, fue sin duda el primer elemento a lamentar. Se trataba de un añadido del siglo XIX por Viollet-le-Duc. Se alzaba a 93 metros y sus 500 toneladas de madera acabaron reducidas a ceniza a la vista de todo el mundo.
El espectáculo debió de ser colosal. Pero los expertos advirtieron de que no debía de cundir el pánico; pues era muy posible que la fachada con sus dos torres...no fueran muy dañadas, y las fotos de bomberos junto a las gárgolas suponían un alivio ante la desgracia.
Lo que parece que sí se han salvado son los rosetones medievales, de los siglos XII y XIII, unas de las obras de arte más importantes de la estructura original de la catedral. Se trata de tres rosetas de grandes dimensiones. La norte y la sur tienen 13 metros de diámetro y, junto a la oeste, representan a la Virgen, al Niño Jesús y al cristo Majestad. Además, incluyen vitrales de santos, ángeles y las flores del paraíso. Pero unas setenta pinturas de los siglos XII y XVIII que se encontraban especialmente en los arcos de la nave, el coro y las capillas y que se habrían salvado. No obstante, el humo las ha dañado y por eso se trasladarán al Louvre para restaurarlas.
Y...
parece que a pesar de todo, todo ha sido una desgracia muy controlada. El Diablo cuida siempre de lo suyo... el Vaticano con toda su belleza seguirá y seguirá en pie, para turistas y estudiosos, pues todo ello da buenos réditos... que todos ya sabemos que Satanás es el amo del dinero...