Sutileza...

Shhh... con sutileza, mucha sutileza... disimulemos incluso.

¿En busca de nuevos y sutiles estímulos?

¿Delicados y suaves como un aterrizaje de mariposa sobre la piel?

Pero a la vez... rebosantes de néctar y polen para compartir...

Con todo el aleteo y cosquilleo del deseo.

¿O corriéndote entre verso y verso, cada vez más perverso?

a ver si es posible, con tanto romanticismo...

 es cosa de dos para que la verosimilitud tiña de vicio mi virtud...

Vestir tus senos...disfrazarlos de grosellas, frambuesas, moras, como mucho cerezas...

Encadenándonos a las frases como la más delicada condena.

Ah, creer o no creer... that's the question.

Como cuando tú misma te retuerces y arqueas si te estremeces y deseas.

Parto del entusiasmo de la convicción radiante, nada más.

Mientras no se disparen las feromonas, el estrógeno, los biorritmos...

Que hasta las pestañas se retuerzan con cada nueva aparición.

Ganchos de la mirada que activan la erección del ojo.

Un seísmo interior inconfesable que se abre a la medianoche

Una mujer y un hombre, adultos y sensatos, nuevos cuerpos para la antigua ceremonia...

Celebrémonos al tomar el valle desierto que abandonaron los dioses.

Vivamos en los pronombres y fundemos una mitología para el júbilo de la risa.

No habrá anestesia suficiente para someternos al sueño

Y sentir cómo en el pecho se nos agita una pulsión.

Pisa firme con los pies en el suelo, pero no te reprimas para alzar el vuelo...

Semillas para un jardín de fértiles recuerdos cuando seamos viejecitos venerables.

Por supuesto... es que yo me enamoro de los comienzos...

los principios, luego todo va languideciendo...

¿Será por eso que nunca el deseo para quieto ni deja de desear?

¿Será que serás una gran lectora de títulos de libros, pero nunca alcanzarás el final de uno?

"Finales", así en plurales, me parece bien...saboreando cada latido, 

lo mejor está en el tránsito del camino.

El arte de vivir dando un paso de ética y otro de estética, la vida es un arte.

Hacer de la vida una obra de arte total y perder la cabeza por la belleza.

Construirnos simulacros e idealizar letras, palabras, frases...

Parrafadas demoradas...lo extraordinario diminuto hasta el más ambicioso infinito...

Sabernos tan cabales como carnales...desear un remolino...

Y tocar el cielo con las yemas digitales...