Santo Prepucio

Después del nacimiento del Niño Jesús, al octavo día, la Virgen y San José determinaron llevarlo a circuncidar para cumplir con la ley de Moisés.

Hoy 1 de Enero celebra la Santa Iglesia Católica, Apostólica y Romana el Día de la Circuncisión de Nuestro Señor Jesucristo. Con éste más que prosaico detalle, Dios se acerca a nosotros en su lado más humano.

A la hora en que escribo esto, 10:36 de la mañana, el silencio es la nota más predominante. Los rayos del sol costero iluminan la mañana, el cielo muestra su tono más azul e impregna mi ánimo de tranquilo y buscado bienestar. Miro la copa de cristal encima de la mesa del salón que acabo de llenarla de agua y meto en mi boca a la reina de la mañana que seguramente será hoy, entre otras cosas, imprescindible en mucho hogares: Es la bien conocida y siempre alabada aspirina.

A través de la caja del opio de las gentes, la Santa Iglesia Católica Apostólica y Romana, nos muestra con toda su parafernalia las grandes obras del arte de la Basílica de San Pedro, que los discípulos del Diablo, artistas y artesanos crearon para su disfrute: el de ellos...si hay otro cielo, seguro que no es tan bello como esa riqueza del intelecto humano. Riqueza que ellos disfrutan en todo su esplendor por constituirse dueños y señores de toda esa riqueza.

Ya suenan las trompetas. El Papa, Benedicto XVI con todo su séquito hace acto de presencia en la pantalla del televisor, el Santo Padre, va a ofrecer la Santa Misa. Se le ve buena cara. Desde hace unas horas ha sido atendido por su médico de cabecera y sus damas de honor; sus camareras, las monjas,, le han ayudado a tomar todas esas pastillas que debe tomar para sentirse bien, pues esta mañana se ha levantado con el cuerpo no muy católico que digamos...ya que algunas de esas pastillas son incompatibles con la oblea sagrada...

La figura blanca y dorada del Papa causa sensación. Sus seguidores dan gracias al cielo desde sus corazones. Benedicto alza su mano derecha con dos dedos dirigidos al cielo: índice y corazón, hermanos con manicura recién hecha...la sonrisa del gurú silencia con su liturgia todo éste beato...le oiremos hablar de todas esas cosas que el pueblo sabe, pero que él sólo intuye...lo ha leído en esos libros escritos por doctos que saben...esos apócrifos que él guarda celosamente bajo llave...Pero ahora lee lo que está establecido en ese libro dorado. ¿Y por qué tienen todos ellos, los purpurados, la voz tan impostada, afeminada por santificada...? ¿será que la abstinencia los convierte no ya en afeminados si no en asexuados? ¿Y ese afán de intentar modernizarse fomentando la fe en los amantes de los perros creando un cielo para ellos? ¿Y esa última novedad de hacer más aséptico el Portal de Belén quitando de un plumazo la mula y el buey?

Joseph Aloisius Ratzinger (Benedicto XVI) recordó en el último Jueves Santo, en su homilía, que la verdadera esencia del pecado es la soberbia...por eso Jesús salió a orar por la noche, que es el espacio en el que el mal debe esconderse de la luz...peligro que al Papa no parece afectarle...pero para demostrar su humildad, en esa Semana Santa, lavó los pies a doce sacerdotes, pies inmaculados regados con el agua bendita de la jarra dorada y secados con ricas toallas Gordian Knot por Matouk..."alejándose (así) de ese gran pecado de la soberbia".

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Nota al pie

Se ha sabido que la cirugía sin dolor en éstas operaciones, parece ser que brillaba por su ausencia...El muchacho de la derecha parece que jura hasta en hebreo...y yo diría que hasta en ara meo...