A ratos lo pienso...
Me casaría contigo...
Es como un latigazo que sobrecalienta
mis sentidos...
Me casaría contigo...lo pienso,
y cada vez que lo pienso me parece
un anacronismo.
Me casaría contigo.
Mataría por ti, me susurraste al oído...
De mi subconsciente al amor...
iría por el camino más corto.
Casándome contigo...
Con un tiro certero y fulminante
dejarías de amarme:
mataría al amor,
casándome contigo...
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Que bueno eso, como, con un tiro certero y fulminante terminaría el amor, un casamiento..
ResponderEliminarMucho, mucho gusto.
Saludos.
Muy bueno el final...
ResponderEliminarun remate que no esperaba...
Un beso Marian.
Facu.
...por eso querías casarte, muy bueno el poema.
ResponderEliminarSaludos.
El amor no muere, morimos nosotros cuando la hoguera de la pasión se extingue.
ResponderEliminarMucha miga en tu poema...;-)
Un besito, Marián.
La seguridad mata la pasión.
ResponderEliminarEl Escritor:
ResponderEliminarSí, muchísimo gusto también, que vengas y me lo digas. Gracias por leerme.
Un saludito.
FacuZ:
Gracias, FacuZ, me agrada mucho que te haya gustado.
Un beso.
Juan Ojeda:
Bienvenido y muchas gracias.
Saludos.
Marisa:
Así es, cuando la hoguera de la pasión se extingue es como morir un poco...
Un amor convencional, tranquilo y sin sobresaltos ¿quien lo quiere?...
Besos, Marisa.
Rorschach:
La seguridad mata...y mataría hasta las ganas de vivir...imagínate si no existiera la muerte ¡qué aburrimiento¡...
Que bueno Marián!! No creo en que casarse sea parte del amor. El compromiso que adquieres con tu pareja no se escribe en ningún papel ni lo tiene que reafirmar nadie.
ResponderEliminarY pienso que para muchos el casarse es el final de su amor por que es como una meta que se ponen y cuando la consiguen no tienen más aspiraciones y por eso se acaba el amor y todo lo bonito....
Un besazo!! ;)
Un suicidio propio de quien siente tanto... ¿amor?
ResponderEliminarLike :)
Pues si es eso el matrimonio, pues ni me caso -aunque para mi eso es muy fácil, no tengo "contraria" con quien hacerlo, jeje-.
ResponderEliminar¿Es entonces un suicidio o un asesinato? me inclino por lo primero.
Un beso muy fresquito.
Gybby:
ResponderEliminarLo bonito es...no conocerse del todo...porque cuando ya se han puesto todas las cartas boca arriba, el juego pierde toda emoción.
Para bien o para mal hay que pensar ya en otra partida.
Un beso.
Ina.
Amor...claro, no "cómo me gustas" o "que bien me siento contigo" Amor es...¿locura?
Un beso.
Ángel Iván:
No tienes "contraria" eh? jajaja...Uno no se casa para estar retirado de la circulación...vive y deja vivir.
Un beso de los fresquitos.
A ratos me paro a pensar, otros me pongo a pensar en las últimas veces que mis pensares no me han conducido a sitio alguno...
ResponderEliminarNo pienso que con el matrimonio se suicide el amor, o que al "casarse" algunos terminen dándole matarile a lo que tenían pocas horas antes de prometerse amarse por los siglos de los siglos... O algo así.
Me ha gustado leerte, que también constituye un acto amatorio. Porque aquí los sí, quiero, son continuistas y capaces de converger en segundas partes que siempre fueron buenas.
Lo mejor es sentir el calor de las palabras, el acento de quien pronuncia para denunciar unas veces, anunciar otras y definir siempre. Deben amarte las palabras para escribir lo que escribes haciéndolo como lo haces...
Por cierto, como reza la canción de Serrano; el amor es eterno mientras dura...
Te dejo un beso, sí, quiero.
Mario
Qué fuerza la de esa última estrofa... Como decía Groucho: "el matrimonio es una institución maravillosa... pero ¿quién quiere vivir en una institución?"...
ResponderEliminarUn beso y feliz verano, Marián. Pásalo bien ;-)
Qué buen poema sobre el compromiso.
ResponderEliminarUn saludo
Maríán, no tengo el gusto de conocerla, como tampoco tengo moderación de comentarios y aunque puedo, no voy a quitar lo ya dicho por usted, pero sí quiero dejarle claro algo:
ResponderEliminarMi espacio se puede usar para escuchar música o para dejar comentarios sobre lo que hay en él según el criterio de quien entre en él, pero de ninguna forma voy a permitir que nadie lo use, y menos usted, como plataforma para incomodar a cualquiera de sus visitantes y mucho menos hablar de alguien que no está presente ahora y que tiene su blog, para que usted diga lo que le apetezca con la seguridad de que le sabrá responder con justa serenidad y elegancia.
No sé cuales serán los comentarios que sus seguidores dejan en su blog, pero sí puede estar segura de que los que le dejan a ella son con el corazón, por algo tan sencillo como que tiene algo especial, que por lo que observo, usted no tendrá nunca, sensibilidad, grandeza, y elegancia.
Así que le ruego que desde este momento prescinda de mi blog para intentar ofender a ningún amigo que entre en él.
A veces creemos ver obsesiones en el "ojo ajeno y somos incapaces de ver la compulsividad en el propio".
Hágaselo ver, puede ser grave.
Mis saludos (lo del respeto hay que ganarlo)
Mario:
ResponderEliminarLos compromisos firmados ante notario pueden resultar siendo un verdadero incordio. Nada es para siempre, y menos en los asuntos de amor...en los sentimientos no se manda... simplemente se deben escuchar, dejarse llevar y procurar ser felices. No hay que complicarse la vida...Ser libres...y si hay algún tipo de esclavitud, que sea el placer el que te domine...
Por suerte el amor es eterno (como dice Serrano) mientras dura...
Como una hoguera...como reza al final de este blog: "El amor arde como el fuego y se consume como el dinero" Dostoievski.
Besos, Mario.
Kinezoe:
ResponderEliminarTe lo estás tomando en serio lo de descansar de la blogosfera ¿eh? Estupendo...Sigue disfrutando. Aunque ya sabes que me agrada verte, pues siempre que vienes me haces reír :-) y sonreír...
Está muy bien eso de Groucho. Como todo lo de él. Ese "axioma" no lo sabía...jajaja...
Un beso, Kine, hasta pronto.
Anibal Jaisért:
ResponderEliminarMuchas gracias, Anibal, que un poeta de tu talla me diga que mi poemita está bien...Muchísimas gracias. Yo procuro leer mucha poesía, algo se me pegará.
Un beso.