No hace mucho una persona (varón) me propuso echarle un pulso...y yo lo entendí en el sentido coloquial de clavar los codos enfrentados en una mesa y hacer fuerza con las muñecas. Ante éste despropósito, siendo yo una mujer, no pude evitarlo y le solté un par de parrafadas, que pensándolo ahora, me resultan carentes del más mínimo estilo elegante.
Pero mira tú por donde, que enseguida reaccionó diciendo: "ah, no, no, un pulso con otro tipo de músculo, el de la lengua". Confieso que me dejó un poco desconcertada, pero enseguida intuí que lo que le gustaba a este tipo era ganar...
Acepté el reto, y...¿fui yo quien le gano?...fue un largo, intenso y demorado morreo atornillado...se quedó sin palabras, hasta que reaccionó y dijo: "ganar, ganar, lo que se dice ganar...tampoco es hacerse el antihéroe con eso de que el fracaso ennoblece tu empresa...pero ganar es como el éxito...otro mal entendido...aunque también sé callarme, sí".
Y al final fue él el que me dejó sin palabras...Y es que a veces vale la pena intentar otras posibilidades...
Jajaja, que pulso tan peculiar. ¿Ganar o perder? que importa en algunas ocasiones... saludos!!!
ResponderEliminarAfrontar el momento desde otra perspectiva es algo que nunca entendí porque al ser humano le resulta muy difícil,los canones establecidos así como las directrices establecidas por la sociedad para cada ocasión coartan el libre-pensamiento y el caracter de los individuos hasta la mismisima alienación.
ResponderEliminarSin duda vale la pena intentar esas posibilidades,ganes o pierdas,vale la pena.
Un beso bien gordo.
Qué espabilao.
ResponderEliminarSólo compiten los que aún no saben si son amos o son esclavos. Se compite por gobierno de la duda. Se compite por ausencia de identidad. Se compite por debilidad de fuerza. Los fuertes no compiten, para eso son fuertes (sintesis hegeliano-niesztcheana)
ResponderEliminarYo si quiero tu beso, te lo robo, o te lo pido, o me lo quedo.
Y si de placer se trata, entonces me interno en tu laberinto, y hago el amor que la minotaura que te habita.
mi beso
el caligrafista.
En ese caso, el asunto no es ganar, sino como se compite.
ResponderEliminarFeliz navidad.
Un abrazo.
El pulso más complicado de ganar es el que se hace con la lengua, sí, pero utilizándola para crear palabras. El pulso verbal es el más temido, el más devastador, el más placentero. No es fácil ser encantador de serpientes pero cuando se consigue, ya no se teme al veneno de la mordedura.
ResponderEliminarUn beso y felices fiestas, Marián.
Texto sugerente y elegante, atrevido e ingenuo a la vez. Bello texto.
ResponderEliminarBuen comentario el de Marisa que, relacionado con el tema, me recuerda: si un hombre que tiene lengua no puede con ella seducir a una mujer no merece su lengua.
Brindo por ese beso francés.
Ciertamente, a mi me dan ganas de intentarlo, de proponerlo de esa forma tan...
ResponderEliminarMr. Thunderstruck:
ResponderEliminarEfectivamente, hay ocasiones en que no está uno para mirar los medidores...
Saludito.
Doloralfa:
Cualquier reto puede ser interesante, y se puede tomar como algo lúdico, la cuestión es abrir puertas a las posibilidades...no estar sujetos a los cánones establecidos...
Un beso.
El hombre de Alabama:
Tu nombre es más largo que tu comentario. No está mal.
Elcaligrafista:
ResponderEliminarNo siempre se tiene lo que se desea. Competir es aspirar con empeño a conseguir algo...
Sí...está muy bien eso de "síntesis hegeliano-nietzscheana". El fuerte puede seguir compitiendo ¿porqué no? la meta nunca está tan cerca como se cree...y cuando se llega ¿a qué se aspira? ¿a que te den palmaditas en el hombro? jajaja, es el camino, caligrafista, y no la meta...¿es mejor seguir dentro del laberinto por tiempo indefinido?...
Mi beso.
El Gaucho Santillán:
Claro, se compite para ganar...¿se gana para seguir compitiendo? todo depende ¿no?
Felices fiestas para ti también.
Marisa:
ResponderEliminarEn eso estamos, claro que sí...tiene que venir aquí una mujer para arrojar un poco de luz en ésta contienda.
Así es Marisa, ese "morreo atornillado" era verbal. Y es tan placentero como el que más, porque es cierto que como dices no es fácil ser encantador de serpientes...y, como en la fábula de Esopo, no es la fuerza, es la persuasión y el encanto...esa mordedura de serpiente ya no se teme por que su veneno no mata; es como un elixir de vida.
Un beso, Marisa, y felices fiestas también para ti.
Pitt Tristán:
ResponderEliminarMuchísimas gracias por tus palabras halagadoras que siempre se agradecen.
Es cierto que por la lengua el hombre seduce a la mujer...aunque en sentido más estricto lo del beso francés que mencionas es sólo un aperitivo.
El Joven llamado Cuervo:
Hay muchas formas, querido, de proponerlo...todo es cuestión de intentarlo...de esa forma tan...tan...
Espabilao si que es, o era, sí, y listo, más que los ratones coloraos... y además es un buen pulso, pues quien lo propone siempre gana. Y si ve que va perdiendo, se esfuerza, y si se esfuerza aparentará una victoria cercana y si ve que empieza a ganar, aflojará para que vuelvan las lenguas a encontrarse en un punto intermedio. O esas personas carnalmente "lenguaraces" son capaces de pactar un alto el fuego, firmar una tregua, darse un respiro, entregarse a un plan b en el que la paz de la paz sea la guerra de los besos, o algo así.
ResponderEliminarEn fin, que muy bonito eso de ir echando pulsos por la vida. Voy a retar a alguien, a ver...
Por lo demás, la parte retofilosófica, pues que sí, que muy bien, como muy bien estás todo lo que escribes. Porque, lo sabes, le das a las palabras lo que la lengua al placer, otra vez, otra, "o algo así, parte segunda"
Te dejo un pulso, sin beso.
Mario
Perdón, se me olvidaba, aquí se cumple aquella máxima de: lo importante es participar... ay...
ResponderEliminarLo importante es competir...y provocar....Jua! Un poco de perversión condimenta... ¿Intentar? casi siempre. Besos Y Feliz Feliz lo que la hag feliz!.
ResponderEliminarMario:
ResponderEliminarEs lo que tiene el lenguaje, que las palabras tienen varias acepciones...y lo importante es saber jugar con ellas...tú no me hables de listos, ni de espabilaos, ni ratones coloraos...porque eres un tío, que en éstos lances, se las sabe todas, o casi todas...porque con las mujeres nunca se sabe ¿no?...
Besos navideños.
Javier F. Noya:
ResponderEliminarSiempre...lo que nos haga felices, buscándole las vueltas a la vida...imaginando perspectivas, buscando ecuaciones gramaticales...aunque sea fuera de las normas establecidas...buscando el ingenio aunque sea debajo de las piedras...
Besos.
… Y al final, ¿¿Qué es lo mas importante, ganar… o participar…??
ResponderEliminarQue satisface mas en un pulso con la lengua?... ¿Las ideas que se van entrelazando y enredándose entre jugosos y húmedos comentarios , las imágenes y descripciones que se fijan con finísimas raices en nuestro cerebro, el intercambio de los sentimientos, el compartir de las sensaciones, el modelado de la racionalidad en base a la comunicación…? ¿O simplemente el quien es el que dice la ultima palabra?
…Un pulso con la lengua… Tentador… Tambien un beso…
Independientemente de quien gane, al fin y al cabo, se puede participar sin ganar, pero no se puede ganar sin participar.
Aparte de que un pulso adecuadamente desarrollado puede llegar a ser un autentico impulso...
Un beso.
bandit:
ResponderEliminarPues... qué decirte. Tu análisis de la situación me ha gustado tanto...tanto...que una vez más, y cuando menos lo espero, me quedo sin palabras...
Un beso.
Hoy
ResponderEliminarEs
Un día
Distinto
La noria quedo paralizada
En Salou, atalaya movediza
De mar y ceniza
Le propongo a Walter en el cascaron de hojalata:
-“saca la china de huevo y fumemos un porro, tengo
Vértigo
Tengo mucho vértigo
La triste feria de agosto pulula en forma de luz y muerte
Suben olores de algodón dulce enroscado en palos de madera
Cuerpos bronceados, rumor de olas y la freidura de pescado
Walter siente la presencia de mis pupilas en el contorno de su bolsillo de cremallera
Hay vértigo y ansia
Un monstruo sepultado al que no pude dar vida
La viña de mi enfermedad amputada en un campo frío de amapolas carnívoras
Con el exterminio llegara la calma
Las tuercas de la noria chirrían, son risas de acero
Llantos, es ares susurrando al viento su romance con el cementerio
Los dos precipitamos nuestro cautiverio al mas allá
No accionamos mecanismos de defensa
Embriaguemos los sentidos con hachis
En esta orgia
De
Un
Paraíso
Perdido
Por los
Rayos
De
Una luna cargada de sangre
Y
Elijamos una baldosa en el hotel
Destinada al esputo
Aunque
Sea de madrugada
El recepcionista
Quien se haga cargo del llavero
Lo bueno es que ambos os pegasteis el lote de mutuo acuerdo, felizmente, y yo sé que ganaste tú, porque ningún tío besa sin querer follar después, y por lo que cuentas no parece que ocurriera. (o la protagonista del relato, disociemos de una vez la realidad de los blogs).
ResponderEliminarGracias por pasarte de nuevo, y no olvidarme entre los mares de la blogosfera. Besos, y adelante también con tus movidas.
Yours,
VD